Una fuente de alimentación, comúnmente denominada alimentación eléctrica, es un componente electrónico encargado de convertir la electricidad de la red de suministro en un voltaje y una corriente adecuados para alimentar los componentes electrónicos de un dispositivo eléctrico. Constituye un elemento de adaptación mecánica o eléctrica que puede funcionar como fuente de alimentación o como unidad mecánica.
¿Qué es una fuente de alimentación?
Una fuente de alimentación permite transformar el voltaje de la red eléctrica en otro voltaje (continuo o alterno). Las tensiones más bajas resultan más idóneas para los equipos electrónicos y eléctricos que utilizamos en nuestros hogares. Aunque existen diversas tecnologías, todas operan bajo un principio común: ajustar el voltaje del dispositivo consumidor, procurando la mayor estabilidad posible y proporcionando la potencia que el aparato requiere y soporta, a pesar de las variaciones de la red de suministro.
Tipos de fuentes de alimentación
Fuente de alimentación para cuadro eléctrico (transformador de tensión)
Muchos aparatos y circuitos domésticos que no superan los 50 V precisan de una alimentación de muy bajo voltaje. Se recomienda encarecidamente una fuente de alimentación integrada para dispositivos destinados a conectarse al cuadro eléctrico. Esta solución ofrece una instalación completamente integrada y limpia. En catálogos especializados, se pueden encontrar transformadores para timbres, intercomunicadores o incluso cuadros de comunicación.
Fuente de alimentación rectificada filtrada
Considerada la tecnología más antigua, también conocida como alimentación lineal, este tipo de fuente de alimentación incorpora un transformador que reduce la tensión de la corriente alterna de 220 V a 50 Hz a un voltaje más bajo, aproximadamente diez voltios, manteniendo la frecuencia de 50 Hz.
Una etapa denominada "rectificador" transforma esta tensión, que oscila entre valores positivos y negativos, en un voltaje constantemente positivo. Posteriormente, se procede a su suavizado, garantizando que el voltaje se mantenga por encima de un umbral determinado.
Fuente de alimentación conmutada
Un tipo de fuente de alimentación que ha ganado considerable popularidad desde su aparición en los años 70. Se caracterizan por ser eficientes, compactas y económicas, con un rendimiento que oscila entre el 75% y el 95%.
Su principio de funcionamiento es relativamente sencillo: la tensión de red se transforma en una alta tensión continua de aproximadamente 300 V. Un transistor "corta" este voltaje, abriéndose y cerrándose miles de veces por segundo. Esta sucesión de impulsos se reconvierte en tensión continua. La duración de conducción del condensador permite ajustar el nivel de voltaje de salida, que se regula electrónicamente para mantener la mayor estabilidad posible.
Es importante tener precaución, ya que estas fuentes de alimentación tienden a generar interferencias electromagnéticas en la red eléctrica que pueden afectar a otros dispositivos. Para contrarrestar este efecto, se recomienda optar por fuentes de alimentación de alta gama con filtros eficaces, protegiendo tanto los dispositivos de las perturbaciones de la red como la red misma de las interferencias generadas.
Fuente de alimentación de laboratorio
Utilizadas en entornos de investigación para alimentar circuitos electrónicos experimentales y realizar pruebas con diversas intensidades y rangos de voltaje. Ofrecen una o varias salidas con voltaje ajustable desde 0 V hasta varias decenas de voltios, permitiendo también regular la intensidad máxima.
Una ventaja significativa es su protección contra cortocircuitos, lo que minimiza el riesgo de daños durante el montaje de circuitos.
Fuentes de alimentación mecánicas
Permiten la adaptación mecánica entre disyuntores, barras colectoras cables o peines de conexión.